Line Color es una excelente prueba de cómo una idea primitiva y una mecánica simple se pueden convertir en un proyecto informal sólido y, lo que es más importante, increíblemente emocionante, del que es simplemente imposible separarse. En resumen, el éxito del usuario depende de la capacidad de quitar el dedo de la pantalla de manera oportuna; en palabras, es simple, pero en la práctica es problemático. El jugador tendrá que controlar un objeto cúbico en miniatura, este se mueve automáticamente a lo largo de la pista marcada, dejando atrás un color jugoso cuando el usuario pone su dedo en la pantalla del dispositivo, y cuando lo quita, el personaje inmediatamente se pone de pie como si clavado en el sitio.
Pero, ¿por qué tantas dificultades, si la pista ya está trazada y la meta está a tiro de piedra? Y es que las localizaciones de Line Color están repletas de todo tipo de objetos con los que el protagonista tiene prohibido interactuar bajo pena de muerte, y las paradas oportunas le ayudan a superarlos sin ningún problema. Todos los obstáculos son dinámicos y por un corto período de tiempo cruzan la pista a lo largo de la cual se mueve el cubo: estos son todo tipo de abanicos y semicírculos que se asemejan a herraduras y enormes placas móviles que pueden aplastar instantáneamente al personaje principal.
Con cada siguiente nivel Line Color, las pistas se vuelven más intrincadas y las trampas más insidiosas, afortunadamente, el camino debe ser corto, y después de la línea de meta, el jugador diestro será recompensado en forma de un cofre lleno de monedas de oro. Se necesita dinero para comprar nuevas máscaras, elegidas al azar, es decir, al azar después de acumular una cantidad suficiente de monedas. Esta novedad casual no se parece a ninguna otra, es brillante, fácil de entender, completamente gratuita y tiene todas las posibilidades de convertirse en uno de los mejores juegos para matar el tiempo en Google Play.